Masaje con el pelo

El cabello femenino actúa como un afrodisíaco para el hombre. Uno de los mayores puntos de excitación para él es el vello púbico que oculta su objeto de deseo. Muchos prefieren también que la mujer no depile sus axilas porque visualizan en el cuerpo de la amante el dibujo de un triángulo de erotismo trazado entre éstas y el monte de Venus.
La cabellera larga o semi larga de una mujer es una de sus armas sensuales, puesto que usada sabiamente puede enardecerlo de deseo acariciándolo entero con el movimiento de sus cabellos, sin dejar que él entre en contacto con su cuerpo ni tocarlo ella con ninguna otra zona del suyo.